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¿Cómo afecta la pobreza en el desarrollo cognitivo de los niños y niñas? Por Koncha Pinós

¿Cómo afecta la pobreza en el desarrollo cognitivo de los niños y niñas? Por Koncha Pinós

 

17 de octubre Día Mundial de la Erradicación de la Pobreza.

 

Ha quedado fuertemente demostrado que la pobreza y el trauma tiene una relación clara en la cognición como en la metacognición. Sobre todo, lo que significa vivir en contextos de malnutrición, inseguridad personal o lugares afectados por el cambio climático

 

En un estudio realizado en Bangladesh por Sharia Hafiz Kakon en el centro internacional de investigación de enfermedades de Daca y Charles Nelson neurocientifico y pediatra. Llevaron a cabo pruebas de resonancia magnética con 130 niños de 36 meses y detectaron patrones diferentes en la actividad cerebral en aquellos que sufrían retrasos de crecimiento por adversidad o malnutrición.

 

La higiene, la dieta deficiente, la inseguridad en el hogar afecta al desarrollo cognitivo del niño, tanto como la depresión endógena de las madres en el embrazo de los mismos.  El impacto neurocognitivo en los niños en situación de pobreza y abandono es aun mayor si crecen hogares con pocos recursos.

 

Son estos dos elementos pobreza y abandono que pueden afectar mas al desarrollo cognitivo de un cerebro sano, a la hora de maximizar su desarrollo y poder aprender en el futuro. Estos dos factores significativamente negativos son ignorados en la mayoría de los currículos que se orientan a la adquisición de materias instrumentales, sin comprender que la pobreza secuestra el cerebro de los niños, no solo su desarrollo, su aprendizaje, su rendimiento académico, sino también su seguridad, su afectividad o su creatividad.

 

La pobreza familiar se correlaciona con los puntajes mas bajos en la preparación cognitiva y académica desde la edad de tres o cuatro años.  Un niño pobre tiene 1,5 mas probabilidad de repetir curso que otro que no lo es, mas del doble de ser expulsado, suspendido o abandonar la escuela.

 

Además, un niño que crece en un contexto que lucha por la supervivencia, no tiene retos, estímulos o desafíos. Hay una relación entre las anomalías cerebrales significativas en el cuerpo calloso, el neo córtex, el hipocampo, la amigadla, las áreas límbicas y el lóbulo frontal y el estar desatendido.  No solo en la etapa que se presentan, sino que las secuelas inciden en el funcionamiento de las habilidades pro-sociales, el funcionamiento de disfunciones, déficit de atención, lenguaje, memoria, y cognición.

 

En base a esto nos preguntamos, como podríamos neurrehabilitar cerebros que sufren dos obstáculos – pobreza y abandono traumático-. Para ello hemos desarrollado un programa anual  para cuidadores que se denomina Neurociencia de la bondad para padres – donde cualquier gobierno, institución o ONG de mas de 50 miembros puede calificar gratuitamente-. Hemos podido comprobar que aquellos padres que lo cursan tienen menos posibilidad de abandonar emocional, psicológica o físicamente a sus hijos. Que esto afecta a estar atentos en áreas de abuso, trauma, falta de atención o cognición.

 

Nuestros instrumentos y resultados son contundentes, en la medida que demuestran que cuando un adulto cuidador sigue un programa basado en el cultivo de la bondad, puede ayudar más fácilmente a aumentar la capacidad académica, la memoria, la atención y la cognición de los menores.

 

Los niños pueden además desarrollar habilidades académicas fundamentales y habilidades pro sociales. Esto nos coloca en un gran imperativo ético, y es hacer que estos hallazgos y la probabilidad de incidir en el máximo de familias ocurra. La mayor parte de los niños en Latinoamérica están en situaciones de pobreza, negligencia y por tanto en riesgo de padecer abuso y trauma intergeneracional. Están en riesgo de tener dificultades cognitivas, académicas y sociales.

 

No podemos ignorar la importancia de lo que sabemos, y como las evaluaciones e intervenciones en edades tempranas, pueden cambiar la trayectoria en la vida de una persona. Los gobiernos, instituciones y organizaciones no gubernamentales, deberían prestar atención a que es realmente la educación, y ayudar a desarrollar programas de nutrición y de potencial cognitivo- afectivo por igual.

 

La pobreza afecta a millones de niños y niñas en el mundo, son los más vulnerables. El día 17 de octubre se celebrará el Día Internacional para la Erradicación de la Pobreza y cuando hablamos de pobreza, no podemos verlo solo con un fenómeno relacionado con la nutrición o la seguridad, sino con todo la sociedad y el futuro de esta.

 

¿Qué hace The Wellbeing Planet para combatir las consecuencias de la pobreza en los niños y niñas?

  • Ayudamos a formar profesionales que trabajen con familias que puedan aumentar sus ingresos, con emprendimiento y soberanía alimentaria
  • Ayudamos a grupos de mujeres que tienen hijos a su cargo, para que mejoren sus capacidades y competencias, y así mejoren su economía, contribuyendo al crecimiento saludable de los niños
  • Impulsamos la educación de docentes en toda Latinoamérica, ayudando a los gobiernos a formar gratuitamente a miles de maestros, para que reciban educación de calidad y contemporánea
  • Investigar neurocientificamente, asumimos con alegría el reto de medir las situaciones de los niños, como viven, como estudian, que comen, y como esto incide en su calidad de vida presente y futura.

La pobreza es evitable no solo hoy, sino en el futuro. La psicoeducacion, la formación y la investigación son tres herramientas importantes para que los adultos que viven y trabajan con niños adquieran las competencias que les permitan ser ciudadanos de derechos, con oportunidades.

¿Quieres ayudarnos a conseguirlo? Colabora con nosotros si eres una organización o institución de mas de 50 niños a tu cargo. Si eres un docente o profesional formándote apropiadamente. Si eres un psicólogo, medico o trabajador social, interesándote sobre instrumentos. Todos nosotros podemos hacer que en el futuro estos niños sean adultos sanos. Todos ellos tienen derecho a un cerebro sano.

 

The Wellbeing Planet

info@thewellbeingplanet.org

www.thewellbeingplanet.org

 

 

Bibliografía recomendada

 

  • Schwarz, ED y Perry, BD (1994). La respuesta postraumática en niños y adolescentes. Clínicas de Psiquiatría de América del Norte2, 311-326.
  • Sedlak, A. y Broadhurst, D. (1996). El tercer estudio de incidencia nacional sobre abuso y negligencia infantil(NIS-3). Washington, DC: Departamento de Salud y Servicios Humanos de EE. UU.
  • Shonkoff, J., Boyce, WT y McEwen, BS (2009). Neurociencia, biología molecular y las raíces infantiles de las disparidades de salud. Revista de la Asociación Médica Estadounidense301, 2252-2259. doi: 10.1001/jama.2009.754
  • Smith, JR, Brooks-Gun, J. y Klebanov, P. (1997). Las consecuencias de vivir en la pobreza para la capacidad cognitiva y verbal de los niños pequeños y el rendimiento escolar temprano. En GJ Duncan y J. Brooks-Gunn (Eds.), Consecuencias de crecer pobre(págs. 132-189). Nueva York, NY: Russell Sage.
  • Weber, DA y Reynolds, CR (2004). Perspectivas clínicas sobre los efectos neurobiológicos del trauma psicológico. Revisión de neuropsicología , 14,115-129. doi: 10.1023/B:NERV.0000028082.13778.14
  • Wechsler, D. (2002). Prueba de rendimiento individual de Wechsler : segunda edición . San Antonio, Texas: The Psychological Corporation.
  • Wechsler, D. (2003). Escala de inteligencia Wechsler para niños — Cuarta edición. San Antonio, Texas: The Psychological Corporation.
  • Widom, CS (1999). Trastorno de estrés postraumático en niños adultos maltratados y abandonados. El Diario Americano de Psiquiatría156, 1223-1229.

 

 

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